El Káiser León

Karl Lagerfeld amasó una fortuna de entre 500 y 1000 millones de dólares en sus 50 años de carrera. Otros datos:
- No estaba casado.
- No tenía hijos.
- Nunca fumó.
- Nada de drogas.
- Quería ser vegetariano pero su médico le aconsejó comer carne una vez por semana.
- Tenía síndrome de Asperger.
- Era súper culto y devoraba los libros.

Nada realmente sorprendente hasta ahora (salvo su fortuna) pero me voy a centrar en 3 datos que sí que me llaman más la atención:
- Decía que no se acostaba con la gente a la que realmente quería para no estropear algo eterno como el amor, con algo pasajero como el sexo y por eso recurría a la prostitución de lujo.
- Se consideraba antiburgués pero tenía avión privado y varias casas de lujo. Aún así, decía que practicaba lo que podríamos llamar "la levedad", que quiere decir que lo más importante es evitar los excesos y liberarse del peso excesivo, ya sea en el cuerpo o en el cerebro.
- No se vestía con pieles por ética personal sin embargo, las usaba en sus creaciones para las altas firmas de moda. Decía: "Fake is not chis but fake fur is". Es decir, lo falso no es chic pero la piel sintética sí lo es. Incluso llegó a crear una colección entera de Chanel con pieles sintéticas. Pero por desgracia, a diferencia de otros grandes de la moda, Lagerfeld siguió empleando y defendiendo el uso de pieles en la moda.
Estos 3 últimos datos me llevan a la conclusión de que el señor Lagerfeld era una paradoja andante y que muy probablemente ésta sea una condición indispensable entre los genios. Seguramente si no conviven cordura y locura no hay explosión creativa. ¿Por qué no dos cosas opuestas pueden coexistir? Las paradojas hacen del mundo un lugar más entretenido.

Karl Lagerfeld y su amante, el modelo Baptiste Giabiconi

Sin embargo, el dato más destacable acerca de Lagerfeld tiene poco de paradoja y mucho de excentricismo incomprensible e inútil. Resulta que una vez, su amante le pidió que cuidara de su gatita de 3 meses durante unos días pero pasado este tiempo, cuando volvió a recuperarla, Lagerfeld se negó a devolvérsela. La llamó Choupette, contrató a dos niñeras para que cuidaran de ella 24/7, un guardaespaldas, un cocinero y por supuesto la mejor veterinaria de París estaba siempre a su disposición. Una vez dijo en una entrevista a la CNN: "Aún no existe matrimonio entre seres humanos y animales... pero nunca pensé que me enamoraría así de un gato". No pudo casarse con ella pero la nombró directora creativa de Chanel y puso un avión privado a su nombre. 

Karl Lagerfeld y su gran amor, Choupette

Rápidamente la gata tenía su propia cuenta de Instagram, fue portada de Vogue en un par de ocasiones y generaba suculentos ingresos por contratos publicitarios. La gata por sí sola ingresaba tanto dinero como para alimentar a tres zoos. Aún así, Lagerfeld se aseguró en vida de que la gatita siempre pudiera estar bien cuidada, incluso tras su muerte y por ello, le compró una casa a una de las niñeras del felino, una tal Françoise, para que viviera con ella allí en caso de su fallecimiento, así que la casita debe ser de quitar el hipo. 

Algunos posts de la antigua cuenta de Choupette en Instagram

La sorpresa vino cuando además se supo que Choupette se convertiría en la principal heredera de la fortuna del diseñador. 

¿Cómo? ¿qué? ¿por qué? ¿pa qué?

Me cuesta mucho creer que alguien con inteligencia, sensibilidad y aparente amor por los animales no done su fortuna a algún fin social de mayor envergadura, a una causa humanitaria, animalista o planetaria mayor. Falta por ver quién o qué heredará los milloncejos de la gata cuando ésta pase a peor vida - porque mejor parece imposible. Hasta entonces ¿qué tal si le damos un voto de confianza? 

Desde que el diseñador alemán falleciera el pasado 19 de febrero no se había vuelto a saber nada de la gatita. En su antigua cuenta de Instagram surgió el movimiento #Where'sChoupette ante el largo periodo de ausencia que tenía desconcertados a sus 286.000 seguidores y por fin, la semana pasada, la niñera Françoise sorprendió a todos abriendo un nuevo perfil oficial para Choupette,  Choupetteofficiel, justificando la ausencia de la heredera por haber estado de luto.

Karl Lagerfeld, alemán, creativo, Asperger, sensible... el Káiser de la moda tenía todo lo necesario para impresionar al mundo para bien o para mal y desde aquí, le hago mi pequeño homenaje al diseñador, pero especialmente a la felina que despertó su amor latente, ese tan auténtico e intenso que te cambia el color de todo lo que te rodea, ese que te hace cometer locuras y te vuelve medio ciego o medio idiota, sin ánimo de ofender. Yo sentí algo parecido a los pocos minutos de conocer a mi gata Mía. Conquistó mi corazón sin control y de forma completamente inesperada. A día de hoy no me quiero ni imaginar una vida sin ella.

¡Viva Mía! ¡Viva Choupette! ¡Vivan los amigos de cuatro patas!

En mi casa mimo a todos y a todas, muy a pesar de Mía, que desearía acaparar toda mi atención.